
La diálisis peritoneal es un tratamiento para personas con enfermedad renal que consiste en la introducción de un líquido especial llamado solución de diálisis en el peritoneo (la membrana que recubre los órganos abdominales) a través de un catéter. Este líquido se mantiene en el abdomen durante un cierto tiempo, y luego se drena y se vuelve a reemplazar con una nueva solución. El líquido de diálisis ayuda a eliminar los desechos y el exceso de líquido del cuerpo. La diálisis peritoneal se realiza en casa y puede ser realizada por el paciente mismo o por un cuidador.
Cuándo iniciar la Diálisis Peritoneal
La decisión de iniciar la diálisis peritoneal se basa en una evaluación individual de cada paciente y su enfermedad renal. El momento adecuado para iniciar la diálisis peritoneal puede variar dependiendo de la gravedad de la enfermedad renal, los síntomas y los factores de riesgo. En general, la diálisis peritoneal se considera como una opción cuando la función renal ha disminuido significativamente, y los síntomas de enfermedad renal avanzada, como la retención de líquidos, la anemia, el malestar y las alteraciones del metabolismo, están presentes. Sin embargo, también puede ser recomendado en estadios tempranos de la enfermedad renal si hay factores de riesgo para el deterioro rápido de la función renal, como la diabetes o la glomerulonefritis. En cualquier caso, es importante tener en cuenta que la decisión de iniciar la diálisis peritoneal debe ser tomada en consulta con un nefrólogo y un equipo de atención médica especializado en enfermedad renal.
En la diálisis peritoneal, se utiliza un líquido especial llamado solución de diálisis que se introduce en el peritoneo a través de un catéter. La solución de diálisis contiene una combinación de sales, minerales y glucose (glucosa), que ayudan a eliminar los desechos y el exceso de líquido del cuerpo a través del peritoneo.
Existen diferentes tipos de soluciones de diálisis peritoneal, que se clasifican según su composición. Las soluciones de diálisis peritoneal más comunes son:
- Solución de diálisis continua ambulatoria (CAPD): que se utiliza para la diálisis peritoneal continua y no requiere la conexión a una máquina.
- Solución de diálisis automatizada peritoneal (APD): que utiliza una máquina especial llamada cycler, que automatiza el proceso de llenado y drenaje de la solución de diálisis.
En cualquier caso, es importante tener en cuenta que la solución de diálisis seleccionada debe ser específica para cada paciente, y su elección y administración debe ser realizada por un médico nefrólogo especialista en diálisis peritoneal.